La litiasis urinaria es una de las afecciones urinarias más infames, debido a su cronicidad (es la tercera enfermedad del aparato urinario más frecuente) y lo doloroso que es expulsar los cálculos. Si estas formaciones se localizan específicamente en los riñones, la litiasis se conoce como renal.
Los cálculos pueden estar formados de distintos minerales cristalizados, y las causas son igual de variadas, pero lo importante aquí es que la gravedad de la litiasis es determinada por el tamaño de estas masas.
Si los cálculos no pueden ser expulsados naturalmente ni con medicamento, entonces nos encontramos con un problema.Afortunadamente, hoy en día existen opciones no invasivas para el tratamiento de los casos graves de litiasis. El médico urólogo puede realizar estas intervenciones quirúrgicas para remover las piedras más grandes sin dolor ni daño.
🏥 Si sospechas que padeces de litiasis, debes acudir con tu urólogo. Sólo este profesional de la salud puede diagnosticarte y designar el mejor tratamiento para tu caso.
Tratamientos no invasivos
Existen tres métodos mínimamente invasivos para tratar aquellas litiasis con cálculos muy grandes, caracterizados por su sencillez y eficiencia. Con fines informativos, te compartimos todo lo que necesitas saber sobre estos procedimientos.
1. Ureterolitotricia láser
¿Qué es?
La ureterolitotricia láser utiliza una herramienta pequeña y flexible con luz que permite examinar los uréteres. Este procedimiento médico comienza con la administración de anestesia regional o sedación; para que después se introduzca la sonda por la uretra y localice los cálculos.La eliminación de los cálculos se realiza mediante litotricia láser, que descompone las piedras renales generando energía. Finalmente, el cirujano verifica que no queden fragmentos en los riñones y coloca un catéter doble J para facilitar la recuperación.
¿Cómo es la recuperación?
La cirugía tiene una duración máxima de 1 hora y media, y el paciente suele estar en el hospital por menos de 24 horas. Según cómo avance la recuperación, el catéter se retira entre 2 y 4 semanas después del procedimiento.
Beneficios y riesgos
Este proceso es altamente efectivo para eliminar cualquier tipo de cálculo renal, y además brinda al cirujano un control completo sobre la intervención. Aunque las complicaciones graves son casi inexistentes, algunos efectos secundarios poco comunes existen, como infección urinaria, leve sangrado al orinar y dolor abdominal.
2. Nefrolitotomía percutánea láser
¿Qué es?
Esta intervención involucra una diminuta incisión sobre el área del riñón, a través de la espalda, en la que se inserta un nefroscopio, el cual permite ubicar los cálculos renales dentro del espacio donde la orina reposa.Las piedras se eliminan con láser, de forma similar al procedimiento anterior. Por supuesto, el paciente desde el comienzo ha recibido anestesia, y se le extraen directamente los trozos de los cálculos o se dejan ser expulsados por la orina.
¿Cómo es la recuperación?
La intervención quirúrgica tiene una duración máxima de dos horas y media, y el paciente debe permanecer en el hospital por 1 o 2 noches. Para favorecer la recuperación, el médico podría insertar un catéter doble J o una sonda de nefrostomía conectada al riñón.
Beneficios y riesgos
Es especialmente útil en casos graves de litiasis, como cuando los cálculos son grandes y bloquean el flujo de orina. Por otro lado, aunque es un procedimiento seguro, es normal experimentar náuseas, dolor y sangre en la orina los primeros días posteriores. La persistencia de estas molestias, sin embargo, deben ser informadas al médico tratante.
3. Litotricia extracorpórea por ondas de choques
¿Qué es?
Este proceso es el menos invasivo para la eliminación de litiasis, ya que no se realiza ninguna incisión ni inserción de herramientas. Los cálculos son desintegrados nuevamente, pero esta vez con el uso de ondas de choque.El paciente solamente debe recostarse sobre un almohadón lleno de agua, lo que permite la ubicación de las piedras a través de ecografías o radiografías. En casos más graves, una sonda puede ser necesaria.
¿Cómo es la recuperación?
Muy sencilla. La intervención médica dura en total alrededor de una hora, y ninguna hospitalización es requerida.
Beneficios y riesgos
Como te darás cuenta, este método es muy eficiente para casos con varios cálculos de tamaños menores. Además, no se le asocia con ninguna clase de complicación; en situaciones poco comunes, el paciente puede experimentar temporalmente mareo, dolor y sangrado al orinar.
🏥 Estos tratamientos, aunque no invasivos, no deben considerarse como el tratamiento por defecto de la litiasis. Son procedimientos que se realizan cuando el urólogo identifica que su paciente no puede liberar los cálculos a través de la orina.