La fimosis es la condición médica en la que la piel del prepucio es incapaz de retraerse y, por lo tanto, la cabeza del pene (glande) no puede descubrirse. Esto puede deberse a múltiples razones, desde motivos fisiológicos hasta infecciones y traumas.

Independientemente de su origen, la fimosis se caracteriza por un prepucio con falta de flexibilidad, lo cual suele ocasionar dolor y problemas al orinar o al mantener erecciones. Adicionalmente, esto dificulta una higiene apropiada, lo que a su vez incrementa la probabilidad de infecciones.

Esta condición médica, sin duda, afecta íntimamente la salud y vida sexual de hasta el 2% de hombres en México, por lo que debe ser atendida lo más antes posible. Te enseño a continuación todo lo que necesitas saber sobre la fimosis, incluyendo las opciones de tratamiento que puedes explorar con tu urólogo.

¿Qué es la fimosis?

Esta condición médica refiere a cuando el orificio del prepucio es demasiado estrecho, apretado y poco flexible, lo que hace imposible que pueda ser retraído para descubrir el glande del pene. Esta retracción es esencial para que el hombre pueda orinar y tener erecciones sin dificultad.

Curiosamente, todos los hombres nacen con fimosis. Es parte natural del crecimiento masculino que un infante no circuncidado tenga un prepucio estrecho; sin embargo, conforme va creciendo, esta piel adquiere la suficiente flexibilidad para retraerse.

Es un problema entonces cuando se llega a la vida adulta y, por alguna razón, el prepucio nunca se desarrolló de forma adecuada. La gravedad del problema derivará en malestares y complicaciones equivalentes, pero sin importar el caso, la intervención médica es necesaria.

Existen tres principales tipos de fimosis:

• Fimosis anular: El tipo más común refiere a la incapacidad general de retraer el prepucio, resultando en una clase de anillo que encierra al glande.
• Fimosis cicatricial: Significa el endurecimiento de la capa externa del prepucio. Se asocia comúnmente con hongos, bacterias, inflamaciones y enfermedades de la piel.
• Fimosis puntiforme: El tipo más grave de fimosis hace totalmente imposible el movimiento del prepucio, ocasionando que las micciones sean muy dificultosas.

Causas de la fimosis

Como ya mencionamos, la fimosis puede ser dividida en dos categorías, de acuerdo a sus orígenes: la congénita (un hombre quien la ha tenido desde nacimiento) y la adquirida (producto de infecciones, enfermedades, cicatrizaciones y más).

Las principales causas de la fimosis adquirida en adultos son las siguientes:

• Infecciones del tracto urinario frecuentes
• Infecciones del prepucio que causan balanitis
• Infecciones de la piel por bacterias u hongos
• Infecciones de transmisión sexual como el VPH y el herpes genital
• Liquen escleroso
• Diabetes
• Trumas en el prepucio

Síntomas de la fimosis

Las fimosis más leves pueden no ocasionar ningún síntoma ni molestia: existen casos de hombres con esta condición que viven su vida de forma normal. Sin embargo, aquellos casos con síntomas pueden exhibir lo siguiente:

• Dolor
• Picazón
• Inflamación
• Manchas o erupciones
• Enrojecimiento o cualquier cambio de color en glande y prepucio
• Secreciones con mal olor
• Coito doloroso
• Problemas al orinar
• Infecciones urinarias, del glande y del prepucio
• Adherencia balanoprepucial (unión del glande y el prepucio)
• Y, por supuesto, incapacidad de retraer el prepucio

Tratamientos de la fimosis

Nuevamente, la gravedad del caso es el principal factor para determinar cuál es el mejor tratamiento. Tu urólogo puede atender la fimosis a través de dos principales métodos:

• Estereoides tópicos: Aplicación de una crema en el prepucio, acompañada de masajeo y estiramiento para flexibilizarlo.
• Circuncisión: Procedimiento quirúrgico para remover parcial o completamente el prepucio.

🏥 El médico urólogo es el profesional de la salud que se encarga de diagnosticar y tratar la fimosis. Si sufres de los malestares de esta condición médica, debes acudir a recibir atención médica tan pronto posible.